Comenzamos la Conferencia General con una bonita Bienvenida de Hna Ona Bessette que nos recordó que estamos hechas, creadas para la bondad, que estamos reunidas para suscitar y llevar adelante un compromiso de promover la unidad, la diversidad, internacionalidad. etc.
Después de dos años de pandemia y de reuniones virtuales, estamos todas de nuevo en la Casa Madre, reunidas cerca del corazón de Marguerite Bourgeoys. La oración de apertura preparada por la hermana Ona Bessette, líder de la Congregación, marca el inicio de este encuentro internacional. La meditación sobre El Camino Sinodal: Una llamada a escuchar, dialogar y discernir unidas, me permite detenerme un poco en cada verbo.
Me invitaron a reflexionar sobre la lectura del Evangelio de hoy de la Visitación entre María e Isabel.
También los invito a reflexionar conmigo, pero en algo que no se asocia normalmente con la Visitación: la humildad de Isabel.